Desde Chiclayo, La Nueve te cuenta su experiencia en la Copa Reto Regional 2016-Zona norte y te trae todos los detalles del torneo que forma parte del plan de masificación y desarrollo del fútbol de menores de la Federación Peruana de Fútbol.

El Plan

La Unidad Técnica de Menores de la Federación Peruana de Fútbol, liderada por Daniel Ahmed, se encuentra ejecutando un plan de masificación y fortalecimiento del fútbol de menores a nivel nacional. Con el objetivo de impulsar la captación del talento y de facilitar una línea de carrera para los jóvenes futbolistas se han armado 40 selecciones regionales juveniles (20 de ellas sub-14 y 20 sub-16) entre las 20 regiones que se han incorporado al plan. Miles de niños y adolescentes han sido observados y 720 elegidos en total para pertenecer a las selecciones de cada Centro de Alto Rendimiento.

El torneo

La primera etapa del campeonato es la que se viene desarrollando en Chiclayo. Aquí participan en formato de todos-contra-todos  los dos seleccionados –sub-14 y sub-16, o categoría 2002 y categoría 2000– de Lambayeque, La Libertad, Amazonas, Cajamarca, Tumbes, Piura y Áncash. De los 7 equipos participantes por categoría, los dos mejores irán a Lima para enfrentarse con los otros dos mejores de la zona centro y la zona sur. Los dos mejores terceros por promedio ponderado también participarán en la final de Lima, a disputarse en diciembre, con lo que se completarán los 8 equipos finalistas por categoría.

Los equipos tienen la indicación de rotar a sus jugadores. Si para un partido fueron suplentes 7 chicos (las selecciones son de 18 jugadores), esos chicos serán considerados desde el inicio en el siguiente juego.

El objetivo del torneo es “mostrar a los más talentosos para que terminen en los clubes profesionales”, explica Ángel Salinas, coordinador de Creciendo con el Fútbol y uno de los principales colaboradores de la Federación en la organización de esta competencia inter-regional. Sobre establecer el vínculo con los clubes, recalca: “Es para eso. Es el objetivo fundamental. Esto es para los clubes.”

Todos los clubes de Primera División deberán contar el próximo año con una sub-15 y una sub-17. “Lo que buscamos es que el torneo sub-15 y sub-17 del próximo año sea un torneo competitivo. Para eso se necesitan los mejores jugadores del país de esas edades. La idea es que los talentosos vayan a clubes cercanos a su región para que se desarrollen con mayor comodidad y de manera descentralizada. Este es uno de los pilares del Plan Centenario, que también incluye el tema de las licencias, los torneos sub-15 y sub-17, el desarrollo de infraestructura, el saneamiento legal de los clubes.”

Salinas profundiza: “Confirmamos en este torneo el buen trabajo de los CAR. Se ha buscado muy bien el talento. Hay mucho talento que está reconfirmando su estadía en los CAR. También, el  buen trabajo de los entrenadores. Y el interés que le está poniendo la gente. Hay un interés por apoyar. Finalmente, otro punto a resaltar, y que para mí es muy importante, es la disciplina con la que se juega. No ves un conato de bronca, un pleito, una malacrianza de un entrenador… se juega fuerte como todo torneo regional pero se juega bien.”

El seleccionador nacional de la categoría sub-17, Juan José Oré, también se hizo presente el campeonato, junto con Edgar Teixiera, de la sub-15. Oré señala que “estamos viendo el talento. Estamos abocados en masificar el fútbol de menores” y agrega que “los clubes de provincia se deben fortalecer con el talento de todos estos muchachos”.

Juan José Oré  y Edgar Teixeira, miembros de la Unidad Técnica de Menores, se encuentran observando a los más de 250 chicos sub-14 y sub-16 reunidos en la Copa Reto Regional-Zona Norte. Al igual que Victor Rivera (Camisa rosada), ex entrenador de la selección peruana sub-20.

Los CAR y sus entrenadores

Sixto Talledo es técnico regional del Centro de Alto Rendimiento de Piura, y trabaja en conjunto con Sergio Valladolid, técnico y coordinador regional, y Alberto Kamahara, administrador del CAR. Talledo señala que la convocatoria para los CAR se inició en el mes de mayo, que en junio y julio se llevaron a cabo las visorías y que en agosto ya se comenzó a trabajar con el grupo casi completo. “Está normado que todos los CAR a nivel nacional deben entrenar lunes, martes y miércoles. Los tres días. Jueves, viernes y sábado los chicos vuelven a sus clubes para la competencia”, agrega.

Cuenta, asimismo, que la detección del mejor talento de la región Piura se hizo a través de visores en la Copa Federación Regional, así como también en campeonatos inter-barrios y campeonatos escolares. Ahí se convocaron e invitaron a los mejores jugadores, con los que han armado sus dos equipos juveniles de este momento. Luego de la captación, Talledo explica que “el trabajo es sistemático y coordinado con la Unidad Técnica de Menores. Esta envía el programa de trabajo por días. A nivel nacional se hace el mismo trabajo”. Finalmente indica que el objetivo de esto es que en el momento de que alguno de estos chicos llegue a la selección nacional no sea algo demasiado nuevo o un salto muy grande. “Este proyecto es excelente. Me parece interesantísimo el objetivo, que viene desde el profesor Ahmed, de contar con la mayor cantidad de jugadores posible y que sean del interior del país y no solamente de Lima. Esto da chance a todos y nos hace mejores”, concluye.

Juan José Oré, entrenador de la selección peruana sub-17, trabaja de manera conjunta con los coordinadores del Centros de Alto Rendimiento de Piura.

Los clubes profesionales

Juan Aurich, Comerciantes Unidos, UTC y Universitario de Deportes se han hecho presentes en el campeonato para observar jugadores. El próximo año, los clubes profesionales están en la obligación de contar con equipos sub-15 y sub-17 –además de sub-20–, y para hacer más competitivos sus equipos se les ha brindado las facilidades para acercarse a observar a los mejores jugadores. La Federación se ofrece, asimismo, como un canal comunicativo transparente entre los clubes profesionales y los jugadores.

Roberto Alva, entrenador de la categoría 2003 de Universitario que participa en la Copa de Oro A de la Copa FPF en Lima, se hizo presente en el torneo, respondiendo a la idea de la FPF de ayudar a los niños a formarse una línea de carrera, y beneficiándose los clubes al mismo tiempo. “La captación es una parte importante de la formación de menores”, señala el entrenador. “Nos interesa un campeonato que reúna a los mejores de cada región. Venimos a que este campeonato sea parte de la captación del club”. Agrega que la observación es compleja y que se debe mirar a los chicos cuando tienen el balón como cuando no lo tienen. “Si es inteligente, si toma decisiones rápidas, su calidad técnica, si está concentrado la mayor cantidad de tiempo, si es buen compañero, si tiene fairplay… son sus dotes como futbolista.”

Gol de la selección regional de Áncash a Piura en la sub-16. El partido se jugó el domingo 13 y acabó 1-1.

La iniciativa de llevar a cabo este campeonato, asimismo, se vincula al programa de licencias de la FPF, pues para el próximo año es un requisito tener menores, como lo explica Diego Simón, encargado deportivo del Juan Aurich. “El programa de licencias te pide tener menores. Para el próximo año se ha exigido dos categorías como requisito. Como no todos los clubes tienen menores, lo que ha hecho la FPF para que los clubes tengan la posibilidad de tener buenos jugadores sub-15 y sub-17 es presentarles este torneo inter-regional de CARs regionales, y así los equipos vean a los jugadores. A partir de esto, que aquellos equipos que no tienen sub-15 o sub-17, armen sus equipos, y aquellos que sí los tienen, los puedan complementar con mejores jugadores”.

Todo esto supone, entonces, un esfuerzo en conjunto por captar el mejor talento posible. Para que luego en los clubes se desarrolle. Finalmente, también recalca que la Federación se ofrece como canal de contacto con los jugadores para que sea haga de la manera apropiada y transparente. Los clubes, la Federación y sus CARs deben trabajar cooperativamente para el desarrollo de los menores.

Las selecciones regionales participan para llegar a la etapa final en Lima. Los jugadores pueden mostrarse y los clubes tienen la posibilidad de observar. Todos ganan.

La experiencia

El entusiasmo con el que se vive el torneo y el increíble potencial de los chicos que en él participan es esperanzador. Así también lo es la idea de que la competencia se esté progresivamente haciendo mejor y más fuerte a nivel nacional, pues de esa manera se desarrollará el talento. El desafío constante es un requisito fundamental para que los niños se conviertan en futbolistas. En este sentido, el campeonato, que se desarrolla por primera vez, es un éxito descentralizador e integrador.

En un inicio los chicos se mostraron muy nerviosos, el ritmo del juego se hacía frenético y el juego impreciso. Asimismo, la cancha del colegio Karl Weiss, una de las sedes del torneo, invita a que se juegue de manera demasiado directa o vertical, puesto que es sumamente pequeña, y angosta sobre todo. Buscar amplitud para generar espacios en esa cancha específicamente se hace muy difícil y los equipos encuentran en los envíos frontales largos una salida más fácil a los problemas que les propone el juego.

Con el pasar de los partidos, los equipos han afianzado su juego y los mejores jugadores se han empezado a destacar. La gente se acerca al colegio Karl Weiss y al Elías Aguirre para observar buen fútbol y estar al tanto de los exponentes norteños del futuro. Los padres de familia deberán comprender, sin embrago, y así la FPF se esfuerza por comunicarlo, que se trata de un torneo de visoría, y que si bien los niños compiten con todo su esfuerzo por llegar a la etapa final, los adultos deben entender que no solo se trata de eso. Que esta sea una experiencia de aprendizaje, tanto en la victoria como en la derrota, es también fundamental para la formación. La captación del talento y la participación descentralizada será insuficiente si no se incide luego en la buena formación.